¿Cómo se pone la sonda vesical?
Paradójicamente, al lado de la enorme prudencia que debe acompañarnos, la columna vertebral deja todo tipo de manipulaciones: con la palma, los nudillos, el talón, el codo, mediante presiones, pinzamientos y toda clase de técnicas extrañas. El límite está únicamente en la inexperiencia y el dolor.