Dejad de rescataros tanto; en cambio, aprended a decir no y a confiar en la capacidad del otro
No cruces nunca los brazos, las piernas ni te metas las manos en los bolsillos. Eso causará una mala imagen de ti. Son actitudes que indican falta de voluntad y falta de confianza con el interlocutor. Incluso puede parecer que tratas de ocultar algún detalle de la charla.